domingo, 20 de enero de 2008

UNIVERSIDAD DE LLEIDA


Proyecto HeadMouse, un ratón virtual para personas con discapacidad


La Universidad de Lleida ha desarrollado un mouse virtual con el que las personas con discapacidad motriz tendrán acceso a las nuevas tecnologías. El proyecto HeadMouse se ha puesto en marcha en el marco de las investigaciones de la Cátedra Indra-Fundación Adecco y permite el control del mouse mediante una webcam y los movimientos de la cara y la cabeza. El desarrollo tecnológico de esta herramienta de trabajo es de acceso libre y gratuito a través de una web puesta en marcha específicamente para este fin.
20 Ene 2008, 09:34 Fuente: REDACCIÓN, LAFLECHA


El profesor de la Universidad de Lleida y director científico de la Cátedra Indra-Fundación Adecco,- el Dr. Jordi Palacín- explicó, durante la presentación del HeadMouse, el funcionamiento del dispositivo que se basa en la utilización de una cámara de bajo coste para captar las acciones del usuario delante de la pantalla. Las personas con discapacidad motriz acceden al control del mouse a través de los movimientos de la cabeza con todas las funciones incorporadas "arrastrar", mientras que las acciones faciales se convierten en diversas modalidades de "clic".


El sistema incorpora un gran número de innovaciones que facilitan el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación. Mediante el uso de algoritmos de visión artificial desarrollados, inicialmente, para el área de la robótica móvil el usuario con discapacidad motriz es capaz, sin ningún tipo de formación o conocimiento previo, de utilizar de forma intuitiva y natural el mouse virtual. Además, una vez instalado el software, el usuario no requiere ningún tipo de ayuda para acceder a la configuración ni para modificar los parámetros que ofrece el sistema.


El resultado final del proyecto puede instalarse y ejecutarse de forma gratuita en cualquier ordenador equipado con una WebCam a través de la dirección de acceso robotica.udl.cat. Esta revolucionaria aplicación está pensada y diseñada para que una persona con discapacidad motriz pueda acceder al universo de las nuevas tecnologías y ayudará a las más de 1.824.000 personas con dificultades de movilidad que actualmente hay en España.


Además, el ratón virtual tiene una vocación global y podrá ser utilizada por cualquier usuario ya que no tiene definida ninguna lengua de aplicación -consta de un manual de ayuda en castellano e inglés-.Continuidad de la Cátedra Indra - Fundación Adecco de la UdLEn el marco de la presentación del proyecto HeadMouse, tanto el rector de la Universitat de Lleida -Joan Viñas-, el director general de Indra -Josep Maria Vilà- y el director general de la Fundación Adecco -Francisco Mesonero- han reafirmado su compromiso con la responsabilidad social a través de la firma de un convenio de colaboración.


Se dan continuidad, por tanto, a las actividades de investigación, desarrollo y transferencia de tecnología -así como de formación y divulgación- en el ámbito de las Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones (TIC).


Además, el objetivo de crear entornos laborales adecuados que permitan a las personas con discapacidad acceder a un empleo, contemplado en el convenio, se materializa en la creación de nuevas funcionalidades en el proyecto HeadMouse y en el inicio de la creación de un Virtual Coach -entrenador virtual- cuyo objetivo final es crear una herramienta que mejore la formación y facilite el acceso al mercado laboral de una persona con discapacidad.

martes, 15 de enero de 2008

EN DETERMINADAS CONDICIONES LA ESTRUCTURA PUEDE MEDIR 2,5 CENTíMETROS Y RESISTIR 45 MINUTOS

Descubren que el agua puede formar puentes


Una investigación realizada en Austria ha producido un fenómeno que nunca había sido observado: agua contenida en dos cubetas de laboratorio, separadas un milímetro la una de la otra, y sometida a cargas eléctricas positiva y negativa, se salió de dichas cubetas para unirse entre ellas formando un puente de hasta 2,5 centímetros de longitud durante 45 minutos. Los científicos creen que el campo eléctrico es el que genera cargas electroestáticas en la superficie del agua, provocando el efecto puente. Por Yaiza Martínez de Tendencias Científicas.


14 Ene 2008, 23:25 Fuente: TENDENCIAS CIENTÍFICAS



Un equipo de científicos de la Universidad Tecnológica de Graz, en Austria, ha hecho un sorprendente descubrimiento: aplicando un alto voltaje a dos cubetas de laboratorio llenas de agua destilada y que estaban en contacto entre sí, se generó de manera espontánea una conexión estable entre el agua de ambos vasos, formándose un puente de agua de hasta 2,5 centímetros de longitud, que se mantuvo suspendido en el aire desafiando a la gravedad durante 45 minutos.



Este fenómeno, hasta ahora desconocido, ha aparecido explicado en la revista especializada Journal of Physics D: Applied Physics bajo el título de "The floating water bridge".



En este artículo se señala que un detallado análisis experimental reveló que, además, el puente de agua transportó estructuras estáticas y dinámicas, así como calor y masa.Los investigadores utilizaron dos cubetas de 100 mililitros, agua tres veces desionizada (es decir, agua a la que se le han quitado los iones de carga positiva y negativa), y dos electrodos -un ánodo y un cátodo- introducidos en las cubetas y cargados de forma que generasen una diferencia de potencial entre ambas del orden de entre 15 y 25 kilovoltios.



Tras la formación del campo eléctrico, se produjo un puente cilíndrico de agua de un diámetro de uno a tres milímetros, en el momento inicial del experimento, en el que las cubetas estaban separadas por una distancia de un milímetro. La superficie del agua se encontraba a tres milímetros de distancia de los bordes de los contenedores, que el agua escaló para "encontrarse" en el exterior de éstos.



Calentamiento del aguaPoco a poco, los científicos fueron separando los recipientes pero el puente de agua se mantuvo, hasta alcanzar los 2,5 centímetros de longitud antes de que la estructura acuosa se rompiese.De forma independiente a la longitud que tuviera el puente durante el proceso, se observó además que el agua fluía de una cubeta a otra, normalmente desde aquélla que contenía el ánodo hacia la que contenía el cátodo.



La dirección del transporte de masa no pudo ser predicha.Con el paso del tiempo, se comprobó asimismo que el puente de agua se calentaba, pudiendo alcanzar los 60 ºC después de 30 minutos, como consecuencia del campo eléctrico.



Los científicos creen que la inestabilidad del puente tras los primeros 45 minutos podría estar ocasionada por este calentamiento.Por último, las herramientas de medición empleadas por los investigadores revelaron la presencia de ondas de superficie y de oscilación internas de frecuencias de tres kilo hercios.



Posibles explicacionesPara explicar el fenómeno, los científicos consideran que el campo eléctrico genera cargas electroestáticas en la superficie del agua que provocan el efecto puente. Según esta hipótesis, el campo eléctrico se concentra en el interior del líquido y convierte las moléculas de agua en una microestructura ordenada y estable que es la que hace que el puente se mantenga.



Esta hipótesis de la micro-estructura tiene su origen en el hecho observado de que la densidad del agua cambiaba entre los extremos de las cubetas y el centro del puente, dado que una micro-estructura que consistiera en una disposición de moléculas de agua podría tener una variación similar de la densidad.Por otro lado, tal como explica al respecto el Instituto Leloir, los científicos detectaron estructuras internas con una cámara fotográfica de alta velocidad que, según ellos, tenían un patrón.



Cada experimento comenzó con una estructura interna simple que, tras unos minutos, dio lugar a otras estructuras menores Según ellos, este hecho podría estar originado tanto por la contaminación del agua con polvo ambiental como por la temperatura creciente del agua antes mencionada.Finalmente, el puente resultó sensible a los campos eléctricos externos: cuando los investigadores acercaron al puente de agua un trozo de vidrio cargado en forma electrostática, las moléculas del líquido se alinearon debido al campo electrostático no homogéneo de la superficie que cargó el vidrio, lo que resultó en una fuerza atractiva entre el puente y el vidrio.



Esto hizo que el puente se curvara hacia el trozo de vidrio y formara un arco de agua.Misteriosa sustanciaEl agua es sin duda la sustancia química más importante del mundo. Se han realizado numerosos intentos de medir o calcular la estructura del agua líquida más allá de la escala de su molécula, formada por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno.



Pero se trata de una difícil tarea por la compleja red que forman los enlaces de hidrógeno, que en sí ha sido objeto de varios estudios experimentales y teóricos, que se considera responsable de muchas de las propiedades especiales del agua y la razón por la que este líquido no puede ser tratado como cualquier otro.



Además, la interacción del agua con los campos eléctricos ha sido explorada intensamente en los últimos años, como en el caso de este experimento, cuyos resultados, según los científicos, suponen una nueva y desconocida manifestación de la desconcertante estructura del agua.



Los investigadores, liderados por Elmar Fuchs, explican que el inusual efecto del puente de agua flotante, así como las micro-estructuras en él observadas, podrían ser una pieza más del puzzle misterioso de la estructura del agua.



Según publica la revista Physorg, el grupo investiga ahora el grado de organización que deberían tener dichas micro-estructuras para explicar los cambios de densidad en el puente de agua. Los resultados aparecerán publicados en el futuro.

domingo, 13 de enero de 2008


SONDAS ESPACIALES
Una sonda de la NASA volará el lunes junto a Mercurio

Una sonda de la NASA se convertirá la próxima semana en la primera nave espacial que volará cerca de Mercurio en 33 años, una travesía con la que los científicos esperan descubrir los secretos de este pequeño planeta abrasado por el sol.

13 Ene 2008, 14:09 | Fuente: REUTERS

La nave espacial MESSENGER de la NASA tiene previsto pasar el lunes a unos 200 kilómetros por encima de rocas y cráteres del planeta más cercano al sol, dentro de una misión diseñada para ponerla en órbita en torno a Mercurio en 2011.

"Creo que vamos a tener grandes sorpresas", dijo en una rueda de prensa Faith Vilas, que forma parte del equipo de científicos involucrado en la misión.

"Ustedes saben que no podemos presumir sobre esto y decir, 'Oh, va a ser de esta forma'. Cada cuerpo del Sistema Solar es muy distinto a cualquier otro cuerpo del Sistema Solar", agregó.

Se espera que la MESSENGER tome las primeras mediciones desde el espacio de la composición mineral y química de la superficie de Mercurio, así como que recolecte datos clave sobre la estructura interna del planeta, incluido su núcleo.

La sonda también estudiará el campo magnético global de Mercurio, y los científicos esperan que la misión contribuya a la comprensión del campo gravitacional del planeta.

Los instrumentos de la MESSENGER recogerán más de 1.200 imágenes y realizarán otras observaciones durante su primer acercamiento. Serán las primeras medidas tomadas a corta distancia desde que la nave espacial Mariner 10 pasó por tercera y última vez cerca del planeta en 1975.

La MESSENGER, cuyo nombre es un acrónimo en inglés para Medición de Superficie, Espacio, Ambiente y Geoquímica de Mercurio, fue lanzada en 2004. La sonda ha viajado a través del sistema solar en su camino a Mercurio, y ya ha pasado una vez junto a la Tierra y dos cerca de Venus.

Los científicos esperan que la MESSENGER entregue muchos más datos sobre Mercurio que los transmitidos por la Mariner 10, que estudió sólo un hemisferio del planeta. Durante su aproximación de la próxima semana, los científicos comenzarán a reunir imágenes de la otra mitad del planeta.

"Mercurio ha sido muy ignorado durante mucho tiempo, demasiado", dijo el jefe de ciencia planetaria de la NASA, James Green. "Con la MESSENGER, creemos que muchos de los secretos de Mercurio serán revelados", añadió.

Cuando Plutón dejó de ser considerado un planeta, Mercurio se convirtió en el planeta más pequeño en el Sistema Solar. Su diámetro tiene cerca de 4.880 kilómetros, cerca de un tercio del tamaño de la Tierra y sólo un poco más grande que nuestra luna.